Hoy vamos a seguir investigando las diferencias entre las culturas alimenticias en Europa y en Asia, viendo qué tipos de alimentos se toman en cada comida a lo largo del día.
En realidad, en China (y en gran parte de Asia) se pueden tomar casi los mismos alimentos en todas las comidas, incluyendo el desayuno. En la práctica, sin embargo, el desayuno suele ser algo más ligero, especialmente en las ciudades, y con unos alimentos más definidos.

Un desayuno normal en China suele consistir en una sopa de tallarines o de won ton, o leche de soja con unas tiras de masa frita parecidas a la porra española (“you tiao”) o con bolas de pan rellenas, hechas al vapor (“xiao long bao”).
Pero el almuerzo y la cena sí son prácticamente idénticos – se toman los mismos alimentos y en las mismas cantidades. En todas las comidas se sirve una sopa y arroz. La sopa puede ser de tomate con huevo, de aleta de tiburón, de pepino con huevo, de carne de hueso… y de muchas cosas más.
Además de la sopa y el arroz, se sirven tres o cuatro platos más: siempre se toma un plato de verduras, y además se pueden tomar un plato de carne (la más común es el cerdo), un plato de pollo o pato, y un plato de pescado o marisco (sobre todo, lógicamente, en zonas más cercanas al mar).
No te asustes – no se sirve a cada persona tres o cuatro platos enteros, con una sopa y un cuenco de arroz. Los platos son comunales y se comparten entre todos los comensales. Contrariamente a lo que ocurre en occidente, se toman pequeñas porciones de varios platos distintos (si incluimos la sopa y el arroz, son 5 o 6 platos para cada comida).
También contrariamente a lo que ocurre en occidente, no se suele beber nada durante las comidas (si no contamos la sopa), ¡pero ninguna comida estaría completa sin su taza de té!, que se suele tomar después.
Pero hoy no voy a seguir contando más “secretos” de este tipo, porque estas – y otras – diferencias entre las costumbres dentro de las comidas en Asia y en Europa serán precisamente el tema de nuestro próximo artículo.